En las últimas horas, el mundo se encuentra en espera del desenlace de la historia del cohete chino, que avanza sin control hacia la Tierra.
Se espera que este artefacto o sus piezas lleguen el próximo 8 de mayo. Ante esto el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, anunció que existe una probabilidad muy baja de daño hacia un territorio o la población por el reingreso del cohete.
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Así mismo el funcionario afirmó que el diseño de estos cohetes se caracteriza por tener un diseño que facilita la descomposición de cada parte al tener contacto con la atmósfera. Mientras tanto China se encuentra vigilando la trayectoria del artefacto, y aseguró que se tomarán las medidas necesarias en caso de que ocurra algún accidente.
Vigilancia mundial
Por otra parte, existen entidades internacionales las cuales hacen vigilancia sobre la trayectoria del cohete, para identificar el punto exacto donde será su caída. El Pentágono norteamericano y autoridades europeas han estado realizando seguimiento del objeto, del cual se cree que realizará su caída entre el día sábado o domingo. Por su parte el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin dijo que se espera que el cohete caiga en una zona deshabitada y que no implique ningún peligro para la sociedad. Así mismo, acusó al Gobierno Chino de irresponsabilidad al dejar que este saliera de órbita. Estados Unidos agregó que no hay un plan para derribar el cohete.
El cohete Long March 5B tenía como propósito lanzar al espacio uno de sus módulos de su estación espacial internacional. Sin embargo, luego de que este se hallara fuera de control, activo todas las alertas de observatorios y autoridades internacionales por la incertidumbre sobre la caída de sus escombros.
Con información de: CNN Español
Por: Daniela Díaz Álvarez
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