Desde tiempos de antaño conocemos las relaciones de interdependencia entre personas, grupos, poblaciones e incluso Estados; conocemos de siempre la importancia de establecer siempre relaciones que permitan el intercambio sea social, económico, cultural, cognitivo… entre otras tantas cosas que pueden compartirse.
Pero también hemos conocido la ilusión de un poco realista sentido de independencia, en la que en esencia tenemos la posibilidad de establecer las prioridades, metas, decisiones, compromisos y demás, que a nuestro juicio parezcan convenientes para nuestro desarrollo, nuestro beneficio y progreso como seres que buscan llevar esta vida lo mejor posible pero, ciertamente como dije, es todo una ilusión que si bien sobre el papel se ve muy pero que muy hermoso, la realidad es que nadie es realmente independiente en esta vida.
Le puede interesar: La Juventud Indecisa
Para ser independiente se requiere de un único elemento clave: No depender de nadie en ningún aspecto clave de la vida. ¿No entendiste? Rebobinemos, las plantas dependen del sol, el agua, la tierra y el aire… bien, los herbívoros dependen de las plantas, del agua, del aire y del sol, por no decir que de escapar exitosamente de sus depredadores naturales; los carnívoros dependen de sus presas, del aire, del agua, y del sol…
Todo bien hasta ahora, pasemos a nosotros los humanos: Dependemos de las plantas, los animales, del aire, del agua, del sol, y esencialmente de las personas: Para comer necesitamos trabajar para cobrar un salario y comprarnos comida, poder pagarnos la seguridad de un sitio seguro para vivir, y poder adquirir las amenidades que la ingeniería de nuestra especie ha logrado desarrollar para facilitarnos la vida.
No olvidemos que, como sociedad, aún con las doctrinas y normas vigentes debemos protegernos incluso de nuestros similares, por lo que dependemos de terceros incluso ya no para poder comer, sino para medio garantizar el normal transcurso de nuestro día a día en estas tierras benditas de Dios.
Ahora, ¿Cuál es el punto de todo esto? Mi completa decepción al oír constantemente en las redes, en los foros, y en algunas conversaciones, que el ser adulto es un ser independiente, sólo por la ilusión de no tener que estar bajo el “yugo” de los padres, que un país es independiente porque ya no depende de un gobierno extranjero, pero implanta uno propio para poder sobrevivir… Qué mentira más cruel pasa por el mundo, ¿Qué te puedo decir?.
Por: Jean Carlos Guerra
Instagram: @jeanguerra.95
*Las opiniones expresadas no representan la posición editorial de Zona Captiva. Es responsabilidad exclusiva del autor.