En días pasados Colombia volvió a ser parte del epicentro mediático cuando se informó sobre el terrible asesinato de un reconocido Fiscal paraguayo en tierras cartageneras, y con el especial detonante emotivo de que el hombre estaba de ‘Luna de miel’ en este país.
Como es sabido Marcelo Daniel Pecci figuraba como uno de los fiscales que accionó legalmente en contra de una red criminal acusada de exportar droga hacia los Estados Unidos. y Europa. A saber esta operación se convirtió en el escándalo de narcopolítica más grande de su natal Paraguay, algo que obviamente hoy las autoridades vinculan estrechamente con su brutal asesinato.
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Posteriores investigaciones que han salido a la luz pública vinculan este reprochable hecho con la posibilidad de que algunos narcotraficantes y políticos que habrían resultado ‘salpicados’ al estar vinculados con la organizacuión criminal “A Ultranza Py” habrían pagado por el acto sicarial que hoy enluta a este país, y para la opinión pública tanto nacional como internacional, resulta aun más deleznable el que al funcionario no le respetaran ni siquiera el hecho de que estuviera de luna de miel, y mucho menos el embarazo de su conyuge.
Ante el peso de las recientes acciones del Fiscal, resulta ilógico que la víctima teniendo consciencia del talante de personajes involucrados en su trabajo judicial contra esta red criminal, no haya optado por viajar acompañado de un cuerpo de seguridad que garantizara su protección y la de su familia, recordemos que la pareja se encuentra en la ya no tan ‘Dulce espera’ de un bebé. En declaraciones a medios locales la viuda refirió no tener conocimiento de amenazas en contra de Pecci, pero por descarte ante su participación en estos entramados de ‘Narcopol’itica’ y siendo ella parte de los medios de comunicación, quizá habría podido igualmente percatarse de la necesidad de viajar bajo un esquema de seguridad.
Estas observaciones dejan en claro muchas cosas, entre ellas la absoluta confianza de Pecci y su esposa en la Justicia de su país, así como el hecho de que si es verdad que su asesinato habría sido ordenado desde las cárceles, se hace imperativo que los gobiernos del mundo acaben de una vez por todas con esas cadenas de privilegios que le permiten a los ‘reos’ que así lo pagan, tener el beneficio de la comunicación tecnológica con el exterior, ese ha sido el detonante de miles de tragedias que han cobrado la vida de muchas personas, han arruinado familias víctimas de sobornos y hasta secuestros, y un sin fin de problemas que no solo ocurren en el Paraguay y en Colombia, Latinoamerica entera esta infestada de una corrupción carcelaria que dilapida los esfuerzos de gente apegada a la Ley que lucha desde el ejercicio de sus funciones por que en nuestras naciones impere la Justicia..
Por: Erika Baute
Instagram: @erikabauteak
Imagen: cortesía de Erika Baute
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