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«Cuando desconectarse de la rutina es tu mejor terapia»

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Imagen: de Discover Puerto Rico

Trabajo, ansiedad, deberes, metas, pendientes, imprevistos, retrasos, ineficiencias, plazos a cumplir, montañas de deudas… ¡Alto!

Respira, espera, calma… ¡Respira!

Uno, dos… En fin, hay que hacer algo al respecto…

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Todo en esta vida es cuestión de balance, el que mucho trabaja, mucho debe descansar… Aquellos días de trabajos físicos contínuos largos y extensos ya no están, se han ido…

Hoy en día conocemos el placer de entender que la mente, como órgano director de nuestro cuerpo, merece su tiempo libre, su tiempo de descanso, una pausa para poder reparar lo que se ha dañado, reponer lo que se ha perdido, y así poder darse un tiempo para asimilar aquello que ha sucedido para reconfigurar el cuerpo.

Hay profesiones y oficios que disfrutan de una baja carga emocional, pues ocurren en entornos seguros y manejan un bajo riesgo laboral, pero, también están quienes manejan una alta carga emocional o física, sin excluir quienes pasan por ambas presiones simultáneamente…

Cuando se lleva una alta carga laboral, hay que hacer pausas, tomar descansos, y dispersarse, dispersar el pensamiento que día a día, momento a momento ocupa nuestra mente.

Bastante popular se ha vuelto el estudio del estilo de vida tradicional oriental, pues se entiende como grandes civilizaciones que a pesar de llevar grandes crisis históricas, lograron modos de vida centradas en balancear cada aspecto de la vida cotidiana como un todo, y con ello llevar una vida más orientada al individuo haciéndolo no sólo capaz de muchas cosas a través de la práctica y la constancia, sino del poder establecer barreras a esos detalles cotidianos que hoy por hoy nos abruman y nos hacen sentir desafiados.

Intento que logren meditar un poco, ahora que el año está terminando, sobre aquello que han logrado este año, por pequeño que sea, contra aquello que se les interpuso y lograron superar, y sólo así puedan entender que si bien todo en esta vida requiere esfuerzo, también vale la pena ponerle pausa a todo y decir: Es tiempo para mí, me lo merezco, he trabajado por ello, y lo voy a disfrutar.

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Por: Jean Carlos Guerra
Instagram: @jeanguerra.95
Imagen: Discover Puerto Rico
*Las opiniones expresadas no representan la posición editorial de Zona Captiva. Es responsabilidad exclusivamente del autor

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