Los franceses empezaron este lunes a utilizar el controvertido pasaporte sanitario, cuya obligatoriedad se extendió a bares, restaurantes, cafés, trenes y otros lugares que acogen al público, en un primer día marcado por la resignación de unos y la pedagogía de las autoridades antes de poner multas.
Jean Djebbari, ministro delegado de Transportes insistió en que se trata de una semana de introducción y, como ya había señalado el ministro de Sanidad, Olivier Véran, la intención es acompañar a los ciudadanos en la puesta en marcha del sistema, especialmente a los vendedores que tienen que controlarlo.
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El certificado sanitario, criticado en la calle pero convalidado en lo esencial por el Consejo Constitucional, entró en vigor este lunes en la vida diaria de los franceses, para luchar contra la epidemia de Covid-19 que sigue sin dar tregua.
Para entrar en bares, restaurantes, cines, teatros, hospitales, trenes de largo recorrido o incluso para tomarse un café en una terraza, habrá que mostrar la patita blanca.
No obstante, habrá una semana de tolerancia con el fin de que las personas encargadas de efectuar los controles a la entrada de los establecimientos se vayan acostumbrando a esta nueva herramienta, que tiene la forma de un código QR, anunció el ejecutivo.
Y es que se trata de una “restricción más”, reconoce el portavoz del gobierno Gabriel Attal, indispensable en un momento en que la situación sanitaria sigue deteriorándose.
Según datos oficiales, el sábado había en cuidados intensivos 1.510 pacientes frente a los 1.099 hace una semana. El número de hospitalizaciones pasó de los 8.368 del viernes a 8.425 un día después.
Pasaporte sanitario
El certificado y el avance de la vacunación deberían evitarnos otros toques de queda y confinamientos”, subraya el ministro de Salud Olivier Véran.
Para ser válido, el certificado, que ya está en vigor en varios países europeos, debe hacer constar la pauta de vacunación completa, o mostrar un certificado de test positivo de al menos once días y menos de seis meses en el caso de que se haya pasado el Covid-19. Un test negativo de “menos de 72 horas” también es valido.
Con información de: El Espectador
Por: Alejandra Fuentes
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Imagen Diario de Sevilla