Ucrania ha detenido a dos agentes rusos que planeaban ataques con misiles en Kiev, mientras que Rusia ha lanzado drones y misiles contra varias ciudades ucranianas, causando heridos y daños.
Ucrania ha capturado a dos agentes del Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB) que tramaban ataques con misiles contra la torre de televisión y unidades militares en Kiev, así como contra infraestructuras energéticas en la capital.
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Según el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), los agentes planeaban ataques aéreos basados en información recopilada sobre las ubicaciones de las tropas ucranianas. Uno de los agentes obtuvo empleo como transportista para obtener información encubierta, mientras que el otro se enfocó en evaluar el estado técnico de la torre de televisión de Kiev y fotografió una central térmica. Ambos agentes enfrentan cargos que pueden resultar en cadena perpetua.
Ataques aéreos rusos con drones y misiles
Rusia ha lanzado una serie de ataques aéreos contra Ucrania utilizando drones y misiles iraníes. Según el teniente general Mikola Oleschuk, de la Fuerza Aérea de Ucrania, se registraron 13 drones iraníes lanzados desde la región fronteriza de Kursk. Las defensas antiaéreas ucranianas lograron derribar diez de estos drones, pero varios impactaron en ciudades como Járkov, Kiev y Sumi, causando heridos y daños materiales. Los ataques fueron repelidos con la intervención de unidades de misiles antiaéreos y equipos de guerra electrónica.
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En respuesta a los ataques rusos, al menos cuatro personas resultaron heridas en la región de Járkov, incluyendo un guardia de seguridad y civiles, debido a los bombardeos con drones y misiles. Además, un ataque contra una zona residencial en Járkov dejó al menos una persona muerta y 19 heridos, incluyendo niños. Edificios residenciales y una institución médica fueron dañados en el ataque, que el presidente Volodímir Zelenski calificó como un acto de terrorismo por parte de Rusia.
