La sociedad a nivel global en las últimas décadas ha experimentado una transformación 360° debido a las exigencias y el rezago de una generación que evidentemente tiene otras prioridades.
Estamos en presencia de grandes transformaciones a nivel cultural, económico, político, tecnológico y cívico y con todos estos factores se hace imperativa una renovación de la educación procurando su adaptación a estos tiempos acelerados que tienen como protagonista a una generación que prácticamente nace aprendida, por lo que muchos de estos sistemas a nuestras juventudes les parecen arcaicos y les alejan de la formalización educacional. Con base en estos hechos es necesaria la intervención del Estado y de los principales representantes de los sectores educativos mundiales para poder seguir cumpliendo su fin primordial que no es otro que garantizar el progreso y desarrollo social del ser humano de manera integral.
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Si de algo estamos siendo testigos los adultos y abuelos en estas épocas, es del rechazo que tiene gran parte de nuestros jóvenes a proseguir estudios universitarios, al considerar que estas carreras largas y algunas provistas de contenidos no útiles según su visión, les roban tiempo productivo y que hay otras formas de hacer dinero y vivir bien sin las ataduras, de una educación y un empleo formal.
En principio habría que estudiar las razones sociales, económicas y humanitarias que de alguna manera son basamento de quienes optan por carreras y formas de desarrollo económico que distan mucho de las convencionales, pues los tiempos y el encarecimiento de la vida así obligan a muchas familias a requerir la productividad de sus miembros de manera anticipada. Si bien es cierto es absolutamente necesario que se logre seguir inspirando a estas generaciones para que se adentren al mundo de las ciencias, estas no son carreras cortas, pero habría que intentar formas de acompañamiento económico a quienes se inclinan por ser futuros inventores, médicos, científicos, ingenieros, astronautas, químicos, físicos, entre otras.
Otra de las formas sugeridas por algunos expertos se refiere a la tecnificación de la educación diversificada para con esto facilitar la inserción de los jóvenes al mundo laboral apenas culminen esta etapa de educación y así promover una mejor calidad de vida de las familias del mundo, asimismo, se ha propuesto desde diversos sectores el replanteamiento de los contenidos exigidos a las comunidades estudiantiles para adaptarlos a las necesidades que verdaderamente cada carrera exige, aunque esto a muchas instituciones podría afectarles de manera exponencial pues para nadie es un secreto que algunas universidades con fines económicos introducen en sus contenidos material que termina siendo filtros que retrasan y encarecen los requerimientos por alumno en cada carrera. Dios bendiga a nuestros estudiantes y a quienes tienen en sus manos la posibilidad de brindar soluciones adaptadas a la realidad actual de nuestros países y de la generación que está llamada a dejar huella en esta parte de la historia mundial de la cual hoy son protagonistas.
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Por: Erika Baute
Instagram: @erikabauteak
Imagen: istock
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