«No hay empresa más difícil que el de negociar un acuerdo entre dos partes enfrentadas al más alto nivel»
Las recientes negociaciones por la guerra entre Rusia y Ucrania han demostrado una vez más el nivel extremo de las hostilidades que pueden alcanzar dos países en conflicto., con cientos de miles de muertos entre ambos bandos el presidente de los Estados Unidos de América ha pasado de ser asistente a mediador en un conflicto que pasó de aproximadamente dos semanas de duración a más de mil cuatrocientos días de cruentos combates sangrientos, de ejecuciones extrajudiciales, de asesinatos en masa, de civiles desplazados, ciudades y pueblos reducidos a escombros, de una paz que los niños anhelan y los políticos aplastan, de una vida que cada vez vale menos por la ambición de unos pocos que jamás se pondrán de acuerdo.
Sorprendentemente Trump ha logrado desvelar las verdaderas intenciones de los líderes de las naciones en conflicto, ha dado a entender que la manipulación de los políticos puede llegar a ser bastante nociva. Más de trescientos cincuenta mil millones de dólares en equipos y ayuda han sido enviados a Ucrania sólo por el gobierno americano, y hasta el momento la guerra no se ha inclinado a favor de Ucrania ni ha logrado detener el avance del ejército ruso dentro de su territorio.
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Hoy el presidente ucraniano demostró que no desea desprenderse del poder presidencialista que la Ley Marcial le ha otorgado durante todo el conflicto, y Trump ante la evidente incapacidad de Zelensky de reflexionar ha decidido que no desea negociar con la prepotente actitud de un político sensacionalista que prefiere poner a sufrir a su pueblo antes que negociar la paz.
Ucrania ha caído en los puestos más bajos del índice de democracia en el mundo, y a pesar de ello se niegan a hacer elecciones libres en los territorios que aún controlan, a pesar de la baja popularidad de su gobierno y de la presión internacional.
Trump está jugando con las cartas de la razón y la verdad, ha logrado reunirse con las delegaciones rusas y ucranianas de manera separada, y ha logrado dar a entender que quiere lograr la paz, pero si no se logra una paz definitiva el mundo podría sentirse afectado de manera cruel y despiadada dentro de unos años… La Primera Guerra Mundial se conoció como la Gran Guerra, y todos esperaban que nunca ocurriera, todos estaban esperanzados en la lógica y la razón, pero el sentido común es el menos común de los sentidos, y el poder enferma a las personas de mente débil.
El negociador hace lo posible, pero pronto se convertirá en el beligerante si las cartas no salen como espera. Sólo queda ver…
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Por: Jean Carlos Guerra
Instagram: @jeanguerra.95
Imagen: Le Monde
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