Gran polémica protagonizada por la congresista Susana Boreal, primero ante sus afirmaciones públicas sobre el consumo de marihuana y ahora siendo acusada de acoso laboral y aprovechamiento del cargo para posicionar con excelente sueldo a quien sería su pareja.
En el ‘Ojo del Huracán’ se encuentra la representante Susana Boreal, quien en los últimos días se ha hecho famosa a costa de su polémico discurso y proceder.
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Resulta que la alta funcionaria a viva voz en medio de una sesión admitió ser consumidora frecuente de marihuana es más aseveró que a diario lo hace, y no conforme con eso también su proceder profesional ha estado en boca de todos tras una reciente demanda de la que es objeto por parte de algunos trabajadores de su campaña, quienes le acusan de presunto maltrato físico y psicológico, lo cual ante la gravedad de estas denuncias es pertinente que se haga una investigación exhaustiva y que se llegue a la verdad de este asunto y se castigue el delito que resultare de la investigación obviamente.
Pero esta historia aquí no termina, nuevamente Boreal se vio inmersa esta misma semana en otro escándalo que involucra la supuesta gestión de la representante para otorgar un cargo en su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) nada más y nada menos que a su supuesto novio, de hecho en algunos medios de comunicación circulan incluso imágenes de la congresista con el sujeto, que además estaría ganando la no tan despreciable suma de más de 9 millones de pesos, por el trabajito, amén de que al parecer ni siquiera acreditó título profesional para dicho ejercicio.
A pesar de que Susana Boreal ha negado alguna relación con este joven, como diría mi abuela “esa agua ya cayó al suelo” y es aquí donde yo la eximo de responsabilidad a ella, si, así como lo lee, es que la culpa no es de esta mujer que abiertamente ha dicho que ella es consumidora de drogas sin importar que al ser funcionaria pública es figura de ejemplo para ciudadanos de todas las edades que aún están algunos en formación y que escuchan que un congresista llega a estos puestos consumiendo, ¿por qué ellos no lo harían? Eso es a mi juicio una grave irresponsabilidad ciudadana de la señora Boreal.
Luego la denuncia por maltrato físico de sus trabajadores, ¿por qué no lo dijeron antes?, durante la campaña que es cuando supuestamente estaba ocurriendo, así la ciudadanía al menos habría dejado de votar por alguien que representa la violencia y la falta de respeto y trato igualitario para con sus semejantes.
Entonces la conclusión es la siguiente, Responsables de, efecto Boreal son todos quienes la llevaron a ese puesto sin averiguar quién era realmente esta mujer y lo que su vida personal y profesional representaba para la nación, más allá de su posición a favor del contundente ‘cambio’ por el que quiso votar una gran mayoría en este país. La lección, no todos los que se arriman a la figura del momento en unas elecciones, necesariamente lo representan, ojo con eso. Dios bendiga a los representantes de este país y a los votantes que ponen y quitan hombres y mujeres de poder en Colombia.
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Por: Erika Baute
Instagram: @erikabauteak
Imagen: Twitter: @SusanaBoreal
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