Siempre hemos sabido que después de grandes crisis y periodos de agitación, llegan momentos de crecimiento y avances cuánticos en todas las ramas del conocimiento humano. Desde tiempos inmemoriales, el ser humano ha logrado los más importantes saltos cuánticos en su forma de vida en los periodos de crisis. Es importante agradecer estos momentos de prueba y avanzar en soluciones reales que ayuden a lograr mayor bienestar, prosperidad y desarrollo para todos.
Y es en este instante de la historia, donde tenemos las mejores oportunidades y avances en tecnología para hacerlo. La inteligencia artificial, el blockchain, el aprendizaje profundo, la realidad virtual, etc; son herramientas que potencian las habilidades y conocimiento humano a limites infinitos. Colombia no puede ser ajeno a este cambio de era, y debe por todos los medios abrir aún más el camino a fondos de inversión extranjeros que apoyen con los recursos financieros suficientes el gran talento de nuestro país.
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Colombia no puede darse el lujo de perder otra década de desarrollo empresarial en esta nueva era. Nuestro país debe crecer, crecer mucho, pero crecer bien. Y es fundamental que las nuevas generaciones entiendan que los negocios al margen de la ley no son una opción. Por otro lado, el Gobierno Nacional debe concentrar todos sus esfuerzos en dar las herramientas y acceso al capital necesario para que estos nuevos emprendimientos prosperen y los flagelos de décadas anteriores no se repitan jamás. Los centros de estudio deberán acercarse a empresarios que puedan transmitir conocimientos y experiencias reales a los nuevos emprendedores (más práctica menos teoría). En definitiva, se debe lograr que todos los sectores económicos del país abran su mente a nuevas posibilidades de negocios y levantamiento de capital inteligente con las diversas opciones que el sector financiero y bursátil tiene a disposición de estas nuevas compañías.
Para dar un ejemplo concreto, el reino de Arabia Saudita lleva cuatro años consecutivos con su iniciativa de inversión futura (Future Investment Initiative). ¿Por qué razón nuestro país en este tiempo no ha llevado o hecho presencia con una delegación de alto nivel diplomático y empresarial que ayude a canalizar recursos para un país con una riqueza inconmensurable como el nuestro?, ¿qué ha sucedido con las recomendaciones hechas por la misión de sabios para nuestro país?, ¿alguien le ha hecho seguimiento a esto? De no ser así, lo primero que debemos replantearnos es la capacidad de ejecutar lo que planeamos en nuestro territorio, requisito indispensable para lograr como nación el ingreso a las grandes ligas mundiales del comercio y a la historia futura.
Para terminar, es menester que todos los ciudadanos tomemos el control de nuestra vida y nuestras empresas. No podemos seguir a la espera que el Gobierno, el vecino o los demás arreglen nuestras vidas y solucionen nuestros problemas. Si lo hacemos bien, la historia nos lo reconocerá.
Por: Juan Francisco Gaitán Botero
Instagram: @botero_juan_2
Imagen: Archivo Zona Captiva
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