En la vida todos hemos notado cómo el dinero es la base fundamental de todas las transacciones cotidianas, recibir dinero de un sueldo, comisiones o remesas son solo unas de tantas maneras de obtener efectivo con el fin de gastarlo en comida, artículos, servicios … Etc..
Todos sabemos que el dinero se gaste, se utiliza para distintos fines pero en general podemos darnos cuenta que el dinero al final puede no durar como esperábamos: De alguna manera este se ha esfumado a la vista.
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Se puede llegar a volver dramático en algunos casos, ¿No?
Bueno, caballeros (y damas), pues no se ha esfumado, nos lo hemos gastado en pequeñas y grandes cosas que no teníamos presupuestado gastar y se nos ha salido de control el gasto; pasa comunmente por la inexperiencia en finanzas, por la acelerada voluntad de querer resolver muchas cosas al mismo tiempo, gastos nuevos que no se tienen en cuenta, o incluso los gastos que de conocen pero de calculan mal y terminan siendo un fuerte lastre para el bolsillo…
Presupuestarse no es algo que nos enseñan en el colegio, en nuestra juventud ni en la adultez, tener un gasto planificado, aprender s decirle no a nuestros gustos sin pensarlo antes, e incluso llevar registro de los mismos en un diario, de una simple hoja de Excel…
Es una sociedad de consumo, nos enseñan a gastar, a aparentar a consumir, en vez de ahorrar, invertir, planificar, y así tener un futuro mas estable, que con solo detenerse a pensar un poco, la vida cambia…
Me pasa y nos pasa a todos, solo es cuestion de detenerse y reflexionar, ¿Estoy gastando bien?.
Por: Jean Carlos Guerra
Instagram: @jeanguerra.95
Imagen: Wise
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