Un estudio de neuroimagen realizado por la profesora Lilianne R. Mujica-Parodi, de la Universidad Stony Brook; mostró que una dieta baja en carbohidratos ayuda al cerebro a rejuvenecer, combatiendo así problemas como la demencia.
El estudio, que fue publicado en la revista PNAS, reveló que después de los 40 años, las neuronas pierden la capacidad de metabolizar eficazmente la glucosa, por tal motivo, las redes cerebrales comienzan a tener desestabilidad, por tanto, la comunicación en las regiones del cerebro se ve afectada.
Para hacer el a análisis, los investigadores utilizaron a mil individuos entre los 18 y 88 años de edad, además de 42 adultos menores de 50 años, con quienes realizaron una dieta alta en carbohidratos, contra una baja en los mismos, para determinar sus efectos en el cerebro.
Al final, los investigadores concluyeron que con el paso del tiempo la glucosa no se metaboliza fácil, mientras que la cetona sí, es decir, que, al reemplazar el combustible neuronal de glucosa a cetona, el cerebro va a tener más posibilidad de mantenerse joven y activo.
Los efectos de la cetona en el cuerpo humano ya se habían demostrado en el corazón, pero esta es la primera vez en que se demuestra la importancia entre una dieta baja en carbohidratos y el correcto funcionamiento cognitivo. Pues la investigación reveló que, tan solo 30 minutos después de beber cetona, el aumentó la actividad cerebral y se estabilizaron las redes funcionales.
Aunque el estudio es un gran avance para la neurobiología, también tuvo un resultado desolador, pues se evidenció que el cerebro humano está envejeciendo mucho antes de lo que se creía.
Con información de: Caracol Radio
Por: Paula Andrea Porto Tavera
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