La muerte de la elefanta, ha provocado una indignación que supera las fronteras del continente asiático, este es un ejemplo más de la crueldad que podemos llegar a tener hacia los animales y esto en muchas ocasiones, nos deshumanizan. Esta es una realidad que vivimos, a diario mueren animales en manos del hombre, y en muchos estados estos hechos son considerados un crimen.
Hathini quién estaba preñada, resultó gravemente herida en su trompa y mandíbulas, luego de comer una fruta que contenía fuertes explosivos, según lo indicó Mohan Krishnan, rescatista que intentó socorrer a la valiente elefanta, durante su trágica lucha. Fueron tres días de agonía para la Hathini, quién intentaba dar todo de sí y mantenerse en pie, para no dejar morir a su cría, con la boca y lengua totalmente destruidos, quiso de forma desesperada comer, sin éxito alguno.
Existen hipótesis qué afirma lo sucedido, como producto de trampas usadas por los agricultores, para evitar que los animales silvestres, se coman sus cosechas. La persona acusada de los hechos, se encuentra en investigación, cabe resaltar que pese a los intentos desmedidos por los rescatistas, Hathini murió en la mitad de un arroyo, donde intentó refugiarse por 3 días y tomar algo de agua.
Con información de: BBC News
Por: Cristian Camilo Bolívar Muñoz
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